Cambiar los latiguillos de los frenos

6 de marzo de 2010 2 Por Victor Carmona
En esta ocasión voy a explicar cómo se cambian los latiguillos delanteros de freno.

Aunque las imágenes son de uno de mis coches, en este caso mi citroën XM, es aplicable a cualquier modelo y marca, pues hay pocas variaciones.

Empezamos con la herramienta necesaria. Tenemos que prepararnos un gato, unas borriquetas, la llave para las tuercas de la llanta (suele valer una 18/19 acodada), un destornillador plano, un alicate de punta curva, una llave fija 10/11, una llave fija 14/15, una llave de tubo 8/9, y opcionalmente una linterna y un espejo, por si hay zonas difíciles de ver.

Lo siguiente es subir la parte delantera del coche con el gato, colocar las borriquetas y quitar las dos ruedas. Accedemos así a la parte en la que están los latiguillos. Observemos atentamente su recorrido y todas las piezas que puedan llevar anejas.

Cuando tenemos bien observado cómo está montado y comprobamos que los latiguillos que tenemos delante son efectivamente los de nuestro coche, procedemos a desmontar los viejos. Conviene también tener alguna lata o recipiente por si cae alguna gotita (es un aceite muy engorroso). Una llave fija 14/15 y quitamos la tuerca que lo sujeta al tubo (algunos coches llevan también algún tipo de grupilla).

Soltamos el tubo también de todos los lugares por los que esté sujeto, y los cables o demás tubos que pueda tener sujetos.



Y una vez que tenemos el latiguillo fuera lo presentamos junto al nuevo para poner todos los accesorios que lleva a la misma medida.


Y traspasamos los del viejo al nuevo, ayudándonos del destornillador y cerrando con el alicate de punta curva. Luego colocamos el otro extremo en la rosca de la pinza y lo enroscamos con la llave fija 10/11, siempre con suavidad y mucho cuidado, porque es de aluminio y es muy fácil trasrroscarlo.

Después le colocamos por todos los lugares en que se sujeta y finalmente le sujetamos en sus soportes todos los cables y/o tubos que pasaban por aquí (por eso era importante, como dije, fijarse bien en todo ello antes de empezar a desmontar).


Y no debemos de olvidarnos de purgar bien todo el circuito. En el caso de los hidráulicos de Citroën no es necesario, dado que son circuitos de alta presión de más de 60 atmósferas y se purgan solos, pero en cualquier otro coche es el momento de buscarse un ayudante que nos pise el pedal del freno bombeando repetidamente y dejando el pie quieto al fondo, mientras que con la llave de tubo 8/9 vamos girando levemente el purgador y vemos salir burbujas. Hay que repetir el proceso tantas veces como sea necesario hasta que no salga aire y el pedal se note bien duro, sin efectos extraños.