Reparar alternador Nissan Vanette (Parte II)
Continuamos con la reparación del alternador de mi Nissan Vanette, que ya vimos cómo se extrae del interior de la furgoneta en la anterior entrada. Ni que decir tiene que esta es la parte más «osada», si crees que no vas a poder con ella, mejor lleva el alternador a un profesional.
Tras escurrir bien todo el aceite del depresor de freno, colocamos el alternador en el banco, bien sujeto con el tornillo, pues vamos a desmontarlo por completo.
Es aconsejable colocar al lado una bandejita para ir depositando todo el despiece, no vaya a ser que algo se nos pierda.
Con la carraca pequeña y un vaso de 10 quitamos los tres tornillos que unen el depresor del freno al alternador. Retiramos el depresor con cuidado deslizando por el eje estriado.
Quitamos el capuchón que cubre el terminal, y cambiamos el vaso por uno de 8.
Y quitamos las dos primeras tuercas. Vemos que la segunda tiene el faston macho (testigo de carga) y al retirarlo hay una tercera tuerca que también quitamos.
Cambiamos nuevamente el vaso a 10 y quitamos la tuerca que falta, la de carga.
Quitamos a continuación los dos tornillos de estrella que sujetan el regulador.
Así podemos retirar el regulador haciendo un leve movimiento hacia el eje estriado.
Con la ayuda de un destornillador botador de un martillazo aflojamos cada uno de los cuatro tornillos que mantienen unido el cuerpo del alternador, y luego los terminamos de quitar con un destornillador de estrella.
Y con el mismo martillo vamos dando golpes secos pero suaves para separarlo en dos mitades, por un lado el inducido y por otro lado el bobinado.
Es el momento de observar el inducido, si tiene las pistas muy gastadas, en cuyo caso podemos plantearnos comprar el inducido nuevo, o están en buen estado, sin escalones, como es mi caso, de manera que con una lijera lijadita con lija de agua le quitaremos la suciedad para dejarlas brillantes.
Con el destornillador de estrella quitamos el tornillo que sujeta el bobinado al casco.
Con la ayuda de un destornillador plano vamos apalancando lentamente todo alrededor del bobinado para irlo retirando del casco, con mucho cuidado para no arañarlo, pues podría derivarse y quedar inservible.
Esta es la avería más frecuente en este tipo de alternadores: vemos lo sucio de aceite que está el casco y el regulador roto por esas filtraciones (se ve la referencia después de limpiarlo).
Sacamos el retén viejo, que es el culpable del paso del aceite desde el depresor de freno.
Es el momento de lavar todo bien para eliminar todo resto de aceite y polvo.
Embadurnamos de vaselina el retén nuevo para que entre con suavidad y no se estropee, pues volvería a pasar el aceite al interior del alternador.
Con la ayuda de un vaso de 17 largo y el martillo vamos dando golpecitos para colocar bien en el fondo el nuevo retén.
Como en mi caso el inducido no está gastado basta con lijarlo suavemente con lija de agua para que quede perfecto.
Colocamos la junta nueva del depresor, para evitar fugas de aceite por el exterior del alternador.
Con todo limpio por dentro y por fuera, con regulador, retén y junta nuevos, ha quedado de estreno…
En resumen, las herramientas que necesitamos, por tanto, son éstas:
- un banco con tornillo
- carraca pequeña con vasos de 8 y de 10
- destornillador de estrella
- destornillador plano
- destornillador botador
- martillo
- vaso largo de 17
- vaselina
- un trocito de lija de agua
- desengrasante o gasolina para lavar bien todas las piezas
- un regulador nuevo, un retén y una junta
Aquí vemos la furgoneta arrancando y cómo se apaga el testigo de carga, prueba de que todo ha ido perfecto.
Para volver a colocar el alternador en su sitio, hay que seguir a la inversa los pasos dados para extraerlo en la anterior entrada
Comenta cualquier duda. Un saludo.
